El Carnaval de la Barbagia en Cerdeña: máscaras y ritos ancestrales

 

El Carnaval en Cerdeña y, en concreto el Carnaval de la Barbagia, es una experiencia única para vivir. Esto se debe al espectáculo que ponen en escena las máscaras tradicionales que, en todos los pueblos de Cerdeña, tienen características distintas y formas y nombres diferentes.

Fonni es el punto de partida perfecto para ir a descubrir el carrasegare, con las máscaras tradicionales de la Barbagia. El Carnaval es un momento de fiesta comunitaria en el que la tradición de las máscaras anima las calles y las plazas, atrayendo a turistas y curiosos de toda la isla y de fuera.

 

En Fonni, el Carnaval tradicional, “Su Carrasecare Onnessu”, tiene como protagonistas a los “urthos”, los “buttudos” y “sas mascheras limpias” de Fonni y otras máscaras de la tradición sarda como “sos mamuthones” de Samugheo y algunos grupos nacionales e internacionales.

Se trata de un día entero de celebraciones que comienzan por la mañana, siguen durante la tarde con el desfile de máscaras y continúan hasta entrada la noche con bailes y música.

Los Carnavales de los pueblos de la Barbagia cercanos a Fonni cuentan con muchos elementos comunes: el recuerdo al mundo de la agricultura y los pastores, las máscaras con rasgos zoomórficos, los rostros ennegrecidos por el hollín, las colectas de vino y dulces y los bailes en la plaza. Pero cada uno tiene su propio espíritu.

 

En Mamoiada, a unos 16 km de Fonni, la danza ritual y mistérica de los “Mamuthones” maravilla y llena de curiosidad a todo el mundo. Llevan pesadas pieles de oveja y esconden sus rostros con máscaras negras de madera que sostienen con un pañuelo. Caminan en fila de a dos con el paso rítmico de “sa garriga”, el conjunto de cencerros de varios tamaños que llevan en los hombros. Alrededor de estas figuras animales están los “Issocadores”, con abrigos de paño rojo y que con su lazo, o “soca”, tratan de capturar a algún espectador.

 

A 17 km de Fonni encontramos Ollolai. Aquí el Carnaval comienza el domingo y el Jueves Lardero, llamado “Jobia Lardajola”, con “sas mascheras o bumbones”, (entre los que se encuentran los Truccos o Turcos), que imitan con imaginación los oficios tradicionales, entrando en las casas y dando vueltas por el pueblo, haciendo participar a todos con cantos y bailes. Durante toda la celebración, los grupos de amigos, “troppa”, se reúnen para comer dulces típicos, como las “sebadas”, y beber vino. El Miércoles de Ceniza se prepara una marioneta, Ziomo, que se lleva por todo el pueblo y es acusado de varias fechorías, por las que será juzgado con el debido proceso y recibirá la correspondiente condena, normalmente la hoguera.

 

Ovodda también se encuentra a unos 17 km de Fonni. La característica principal de su Carnaval es que se festeja también el Miércoles de Ceniza, de una forma muy colorida y transgresora. El personaje central del proceso es Don Conte, que representa el poder y, por ello, es objeto de insultos y burlas. Todos se visten con viejos trapos de colores y se pintan de negro el rostro. Se baila, se canta, se bebe y la fiesta culmina con la hoguera del fantoche en la plaza.

 

En Orani, a 30 km de Fonni, el domingo de Carnaval y el Jueves Lardero, entre las máscaras de broma, de “iseria”, encontramos las de “Su Bundu”, la única hecha con corcho coloreado de rojo. Representa la transfiguración del hombre en buey y simboliza al dios del viento, invocado para ayudar a separar el grano de la paja. Desde el Jueves Lardero hasta la “pentolaccia”, no faltan cantos ni bailes tradicionales en la plaza acompañados por la música del organillo.

 

Para ver a los “Boes e Merdules”, las máscaras de Ottana, hay que recorrer algo más de 40 km desde Fonni. Los “Boes” llevan pieles de vaca y el rostro cubierto por máscaras de madera de peral silvestre, con unos largos cuernos. A los hombros llevan una bandolera de cencerros, “sas sonazzas” o “su erru”, colocados sobre un cinturón de cuero. También los “Merdules” llevan pieles de oveja, pero sus máscaras de madera tienen facciones humanas. Los “Merdules” llevan atados a los “Boes” con un lazo, “sa socca”, y en la otra mano un bastón con el que frena su rebeldía. Los “Boes” son siempre mudos, mientras que los “Merdules” hablan con una voz chillona.